¿Qué es una astilla?
Una astilla es un pequeño trozo de objeto que se ha incrustado en la piel. Suele suceder cuando manipulamos madera, metal, vidrio, entre otros materiales.
¿Cómo saber si tengo una astilla?
Normalmente, cuando tenemos una astilla en el dedo, sentimos a veces dolor en la zona afectada y podemos ver una especie de «mancha» o «punto» negro o café claro sobre la piel. En algunos casos, la astilla puede no ser visible a simple vista.
¿Cómo quitar una astilla?
Existen varios métodos para quitar una astilla del dedo. A continuación, se describen algunos de ellos:
1. Con una aguja
Este método es el más común. Para hacerlo necesitas lo siguiente:
- Una aguja esterilizada (para esterilizar la aguja, se puede sumergir en alcohol durante unos minutos).
- Una pinza pequeña (si no tienes una pinza, con los dedos también puedes hacerlo).
- Una gasa o algodón para limpiar la zona.
Para quitar la astilla, sigue estos pasos:
- Lava tus manos y la zona afectada con agua y jabón.
- Con cuidado, intenta extraer la astilla con la pinza. Si no puedes sacarla, usa la aguja para hacer una pequeña incisión en la piel alrededor de la astilla.
- Con la pinza, sostén el extremo de la astilla y tira suavemente. Si la astilla es demasiado profunda o grande, es mejor pedir ayuda a un médico.
- Limpia la zona con una gasa o algodón.
2. Con cinta adhesiva
Este método es efectivo si la astilla no está demasiado profunda y es lo suficientemente grande como para verla a simple vista. Para hacerlo necesitas lo siguiente:
- Cinta adhesiva o un pedazo de vendaje adhesivo.
Sigue estos pasos:
- Lava tus manos y la zona afectada con agua y jabón.
- Pega la cinta adhesiva sobre la astilla y presiona con suavidad.
- Retira la cinta adhesiva con cuidado. La astilla debería salir pegada a la cinta.
- Limpia la zona con una gasa o algodón.
3. Con bicarbonato de sodio
Este método sirve para aflojar la piel alrededor de la astilla. Para hacerlo necesitas lo siguiente:
- Una cucharadita de bicarbonato de sodio.
- Agua tibia.
Sigue estos pasos:
- Mezcla la cucharadita de bicarbonato de sodio con agua tibia hasta obtener una pasta.
- Aplica la pasta sobre la zona afectada.
- Deja actuar por unos minutos
- Lava la zona con agua tibia.
- Intenta quitar la astilla con la pinza o con tus dedos. Si no puedes sacarla, es mejor pedir ayuda a un médico.
Conclusión
Quitar una astilla puede ser un proceso doloroso, pero es necesario para evitar infecciones y otros problemas de salud. Si después de intentar los métodos mencionados aún tienes la astilla, es mejor consultar con un médico para que la extraiga correctamente.