Introducción
El mortero es uno de los materiales más utilizados en la construcción para unir elementos estructurales como ladrillos, bloques y baldosas. Sin embargo, cuando el mortero se seca en las baldosas, puede ser un verdadero dolor de cabeza para removerlo. Afortunadamente, existen métodos para quitarlo a mano sin dañar tus baldosas. A continuación se presentan algunos pasos para quitar el mortero de tus baldosas y dejarlas como nuevas.
Lo que necesitarás
- Cepillo duro
- Esponja
- Agua caliente
- Ácido muriático (opcional)
- Guantes de goma
Paso 1: Preparación
Antes de comenzar a quitar el mortero de las baldosas, asegúrate de tener todo lo que necesitas. Usa un cepillo duro para barrer cualquier residuo de mortero suelto que puedas encontrar en las baldosas. Toma un cubo y llénalo con agua caliente, este será tu solvente.
Paso 2: Remoción de mortero
Moja una esponja en agua caliente y exprime el exceso de agua. Coloca la esponja en la superficie del mortero y déjala allí durante unos minutos. Después, frota con la esponja el mortero en movimientos circulares. Repite este proceso varias veces hasta que el mortero sea lo suficientemente suave para poder retirarlo con facilidad. Una vez que hayas retirado el mortero, enjuaga las baldosas con agua limpia y seca con una toalla para evitar la acumulación de agua.
Paso 3: Ácido Muriático (Opcional)
Si el mortero es particularmente difícil de remover, puedes agregar una solución de ácido muriático al agua para un mayor poder de limpieza. Este ácido es muy fuerte y debes usar guantes de goma para protegerte. Mezcla 4 partes de agua con 1 parte de ácido muriático. Moja la esponja en la solución y frota el mortero hasta que se ablande lo suficiente como para ser retirado. Enjuaga con mucha agua y asegúrate de estar bien protegido mientras realizas este proceso.
Conclusión
Retirar el mortero de las baldosas puede ser tedioso, pero no es imposible. Utiliza los métodos adecuados y ten paciencia y tus baldosas lucirán perfectas en poco tiempo. Para evitar tener que limpiar el mortero de nuevo, asegúrate de retirar cualquier exceso de mortero inmediatamente después de colocarlo. ¡A disfrutar de tus baldosas recién limpias!