Introducción
El hipo es un movimiento involuntario del diafragma que causa una contracción repentina y un sonido de “hup”. En los recién nacidos, el hipo puede ser algo muy común que puede durar desde unos pocos minutos hasta horas. Aunque puede ser normal, puede resultar molesto para el bebé y llevar a la familia a buscar maneras de detenerlo. Por suerte, hay varias técnicas sencillas para quitar el hipo a un recién nacido.
Métodos para quitar el hipo a un recién nacido
Método 1: Dar de comer al bebé
Cuando los bebés comen, tragan aire, lo que puede causar hipo. Darle un poco más de leche o agua al bebé, puede hacer que trague y se olvide del hipo. Pero no le des en exceso ya que puede tener una sobrecarga de alimento.
Método 2: Hacer eructar al bebé
Colocar al bebé sobre nuestro hombro o sobre nuestra rodilla y suavemente frotar y dar golpecitos en su espalda. Esto ayuda a liberar cualquier aire atrapado en su estómago que puede estar causando el hipo. Es importante hacerlo siempre después de dar de comer al bebé.
Método 3: Cambiar la posición del bebé
Si se acaban de dar de comer al bebé y después de intentar hacerle eructar no funciona, prueba a cambiar la posición del bebé. Colocarle acostado boca arriba durante unos minutos, puede ser suficiente para que el hipo desaparezca. Pero hay que tener en cuenta que el boca abajo no es una posición segura para un recién nacido y no se debe utilizar esta posición.
Método 4: Masajear suavemente el diafragma del bebé
Colocar al bebé sobre nuestras rodillas, poner nuestra mano en la barriga y aplicar una leve presión con movimientos circulares suaves. Esto puede ayudar a relajar el diafragma y aliviar el hipo. Es importante hacerlo con cuidado y delicadeza para que no lastimemos al bebé.
Conclusión
Aunque el hipo en los recién nacidos puede ser común, puede causar molestias a los bebés y a los padres. Probar las diferentes técnicas enumeradas anteriormente puede ser beneficioso para eliminar el hipo. Sin embargo, es importante tener en cuenta que si el hipo persiste durante mucho tiempo o si está acompañado de otros síntomas como problemas respiratorios, fiebre u otros problemas de salud, es importante que consultes con tu médico.
- Dar más leche o agua al bebé
- Hacer eructar al bebé
- Cambiar la posición del bebé
- Masajear suavemente el diafragma del bebé