Introducción:
La tarima flotante es una opción popular para agregar un acabado elegante a cualquier piso. Si bien colocar tarima flotante puede parecer un proceso abrumador, es relativamente sencillo si sigues los pasos adecuados y tienes las herramientas necesarias.
Antes de comenzar:
Es importante que verifiques que la superficie del piso donde colocarás la tarima esté completamente limpia, sin restos de suciedad o polvo. Además, asegúrate de medir cuidadosamente la superficie para calcular la cantidad de material que necesitarás.
Materiales requeridos:
- Tarima flotante
- Sistema de aislamiento acústico
- Tela asfáltica
- Underlayment
- Sierra eléctrica o manual
- Metro y lápiz
- Martillo y clavos
- Barra de tracción
- Cuñas para expansión
Pasos a seguir:
Paso 1:
Coloca el sistema de aislamiento acústico y la tela asfáltica en la superficie del piso. Esta etapa es importante ya que el aislamiento acústico reducirá el ruido y la tela asfáltica evitará la aparición de humedad.
Paso 2:
Comienza por colocar underlayment, una capa de espuma que actúa como barrera de vapor y proporciona una base sólida y uniforme para el laminado.
Paso 3:
Mide la longitud y el ancho de la habitación para calcular la cantidad de material que necesitarás. Es recomendable tener un 10% adicional de material en caso de cortes incorrectos o desperdicio.
Paso 4:
Corta las tablas de la tarima flotante en la longitud correcta utilizando la sierra eléctrica o manual. Es importante mantener la sierra recta y asegurarse de que los cortes sean uniformes.
Paso 5:
Comienza a colocar la tarima flotante en el extremo de la habitación que está frente a la puerta. Asegúrate de dejar una distancia de 1 cm entre el borde de la tarima y la pared para permitir la expansión del material.
Paso 6:
Coloca la tarima flotante siguiente en la fila, uniendo la lengüeta y la ranura. Utiliza la barra de tracción para unir correctamente las distintas tablas y coloca cuñas de expansión para separar la tarima de las paredes laterales.
Paso 7:
Repite este proceso hasta cubrir toda la superficie de la habitación. Si es necesario, utiliza una sierra para cortar las últimas tablas para ajustarlas a la forma de la habitación.
Paso 8:
Coloca los zócalos para cubrir las cuñas de expansión y para proporcionar un acabado elegante.
Conclusión:
Con los materiales adecuados, herramientas y pasos, colocar tarima flotante puede ser un proceso sencillo y gratificante que mejorará la apariencia de cualquier piso.